Cuando la mamá de Iraia me escribió para ir a Bilbao a hacerle fotos a su pequeña, me puse muy contenta, soy una corre caminos como dicen mis amigas, me encanta coger el coche y conducir, creo que es una de las cosas que más me relajan.

Lo organizamos todo para finales de Enero pero fue imposible, ese día estaba la carretera nevada y a mitad camino me toco dar la vuelta y regresar a Madrid. Pocos días después yo me marchaba a Estados Unidos y hubo que posponerlo.

En mi segundo intento todo salió perfecto. Hasta el gps que siempre se pierde, lo hizo estupendamente. Y mi modelo, que decir de mi pequeña modelo… Uff! Además de ser preciosa, simpática y una bebe tranquila fue una sesión de los más divertida. En el primer momento se puso seria y después de cinco minutos no podíamos pararla, era una risa.

Después de un ratito sin parar de reírnos, llegamos al momento hambre. Paramos, nuestra modelo comió y la dejamos descansar un poquito… y a los 10 minutos estaba dormida!

Y mirar las fotos que se pueden hacer a bebés de tres meses.

¡Eso sí, con paciencia y mucho cariño! Quiero recordar que en todas mis sesiones se toma el tiempo necesario con cada bebé o niño y la prisa no existe mi trabajo!